Esta piragua-vivienda, tallada en un solo tronco de árbol, fue desenterrada junto con otras 15 embarcaciones antiguas durante las excavaciones del aparcamiento de Saint-Georges en Lyon. Este excepcional descubrimiento atestigua la importante actividad del cercano puerto de Sablet. Gracias a su trampa central, esta piragua se utilizaba con toda seguridad para transportar y conservar el pescado capturado en el río Saona mientras estaba vivo, hasta su venta en los mercados flotantes o no.